Antropóloga, poeta, guionista de comic, cantante, escritora. Silvia Pérez Simón es una trabajadora de la cultura que practica el arte de manera profesional en diferentes disciplinas.
Como ella misma dice, uno solo no hace nada en este mundo, por eso lleva una práctica asociativa con otros artistas. Pertenece a la asociación de escritores Océanos de Tinta, desde la que tienen presencia en ferias del libro y ponen en marcha proyectos colectivos, y colabora con la asociación Divertea, que realiza una labor de difusión cultural en la ciudad de Cáceres.
Hablamos con Silvia sobre su carrera multifacética y sobre cómo es trabajar en el sector de la cultura en la España actual.

Eres escritora, cantante, antropóloga, gestora cultural. ¿Cómo es hacer tantas cosas y no desfallecer en el intento?
Buena pregunta. Yo escribo desde niña. Es un impulso natural que tengo. Tengo esa necesidad de contar, ¿no? Lo que pasa es que una con el tiempo va formándose, y también tengo esa curiosidad por querer aprender.
Esa inquietud me va moviendo por circunstancias de la vida que a veces no van en la dirección prevista, las cosas a la primera a lo mejor no salen, pero te van abriendo nuevos caminos. Luego, también hay etapas, donde te sientes más inclinada por unas actividades que por otras.
En el ámbito académico he estado durante años. Digamos que ahí dejé un poco aparcado lo literario. Lo que pasa es que, aún así, me había tirado tantos años escribiendo, que tenía acumulado varios poemarios.
Cuando terminé un poco esa faceta académica, conocí el mundo del cómic. A través de un amigo, me hizo meterme más en la experiencia de la lectura de cómics, y de todo lo que está más allá del manga y de los superhéroes. El género costumbrista es el que más me gusta. Fui explorando la literatura a través de la redacción de los guiones. Me salió de una forma natural.
Luego está lo de la música. Es algo que siempre me ha gustado, pero lo tenía en un segundo plano, hasta que a base de conocer músicos me he ido colando en distintos proyectos.
Entonces ahí está el lado académico, literario y la música, que los he ido compaginando, por pura pasión. Por seguir aprendiendo, por conocer la vida misma, a través del aspecto creativo. Es lo que me gusta y nunca me ha supuesto ningún esfuerzo.
El problema lo veo en consolidar proyectos, en conseguir que más compañeros se comprometan. Por ejemplo, si tengo un cómic, el hándicap está en conseguir un dibujante que pueda estar conmigo hasta el final. Lo mismo con la música. Yo estoy con varios compañeros músicos, porque, como ellos a su vez tienen más grupos, para poder atender las actuaciones, necesito contar con varias opciones. Ya me ha pasado alguna vez de tener que decir que no a una actuación porque no tenía un músico disponible.
El cómic, la música, la literatura son como diferentes formas de contar, de comunicar. Manejan diferentes formatos, pero en el fondo estamos haciendo lo mismo. ¿Cómo lo ves tú?
Yo soy una persona muy visual, pienso en imágenes. Entonces, a la hora de escribir guiones, tanto de cómics como audiovisuales, tengo más o menos la imagen clara. Sé lo que yo quiero transmitir. Lo que tengo que pulir en cada viñeta. Lo que quieres transmitir al dibujante o al compañero en el trabajo audiovisual. Pero la poesía también es visual, tiene metáforas, recuerdos de un momento, sensaciones que son táctiles. Pero detrás de las imágenes se esconde algo más. Por lo menos, la poesía que yo trabajo.
De eso también habla la antropología. La técnica de la entrevista en profundidad, de las historias de vida. Parte de esa certeza de que las personas necesitamos darle sentido a nuestra vida a través de historias, de narraciones.
Y qué hablar de las canciones. Son pura emoción. Es otra manera de comunicar con los sentidos.
Recuerdo un comentario de un amigo que decía que una fotografía si no te llega a la primera, no es buena. Tiene que ser algo que te impacte. Que tú lo mires y quieras seguir mirándola, sino es así, la descartas.
Lo mismo pasa en la poesía, te tiene que quedar ese regusto de que hay algo más. Como cuando miras una fotografía en blanco y negro. Que tú la miras y quieres seguir explorando ese abismo al que te estás asomando.
Luego tú tienes una empresa con una orientación cultural: “Comunicar con alma”. Cuéntanos en qué consiste.
En realidad, soy yo misma como autónoma. Quiero matizarlo. Porque uno solo no hacemos nada en este mundo. Al final, y al principio, estamos con los demás.
Creé esta marca, porque tenía sentido. No sé, era como ir más allá. Y bueno, además, Alma Simón es el nombre artístico que me puse para cantar, por lo que estaba en coherencia.
El proyecto engloba las facetas en las que yo me he ido desarrollando profesionalmente. Yo estudié educación social antes de antropología. Esto me ha enseñado a elaborar proyectos en todas sus fases, tanto educativos como culturales. Puedo intervenir en el diseño de los proyectos, en la coordinación, en la puesta en marcha, en la difusión, en la evaluación.
Esto me ha permitido, por ejemplo, aplicar mis conocimientos en las escuelas taller, que es uno de los ámbitos donde durante más tiempo he podido trabajar, en la educación de adultos, en la formación, en lo que ahora llaman Coaching.
Uso esta palabra para que se entienda. Oriento un poco el desarrollo de habilidades sociales, habilidades de comunicación, motivación profesional, orientación laboral en cuanto a cómo hacer un currículum, cómo presentarte a una entrevista de trabajo. Y ya incluso, ateniéndonos a los nuevos tiempos, también en desarrollo personal.
Ya sea en un ámbito académico, laboral o personal ayudo a la gente a comunicarse, a relacionarse mejor con los demás y con ellos mismos.

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En los huequecitos que tengo, dentro de estos proyectos formativos, me dedico a mis otras actividades artísticas. Ahora mismo estoy en una escuela profesional en Almendralejo (Badajoz). Impartiendo un curso formativo de 6 meses. Estoy de ocho a tres, y luego por la tarde, me pongo con mis proyectos literarios.
Como gestora cultural destaco mi experiencia como directora en la Universidad Popular de Trujillo. Tuve la libertad, nada más terminar la carrera, de montarla y dirigirla desde el principio hasta el final. Diseñé el programa de la universidad, busqué las subvenciones para distintos proyectos. Investigué las necesidades que había en la localidad para planificar cursos, hablando con los comerciantes y con el tejido productivo. Organicé formaciones específicas como forja, construcción tradicional. Actividades de promoción del patrimonio cultural de la ciudad, Trujillo tiene mucho. Todo en coherencia con el desarrollo rural en el contexto donde estaba trabajando. Fue un proyecto muy bonito.
La gestión cultural me ha permitido, en un momento dado, programar unas jornadas de encuentros entre escritores.
Digamos que las habilidades que he ido adquiriendo en unas profesiones las he ido aplicando en las otras áreas.
Cómo me sucede a mí, yo creo que tú ves la acción cultural como algo más que una necesidad social o personal. Es también un sector económico y una actividad profesional. Uno de los problemas que tenemos los artistas es cómo monetizamos nuestro trabajo, cómo nos mantenemos para sacar adelante los proyectos. Como es lógico, cuando trabajas por tu cuenta, tienes que darte de alta de autónomo, pero en el sector de la cultura no es fácil. ¿Crees que necesitaríamos más ayuda por parte de los poderes públicos, o al menos, que no nos apretaran tanto?
Me parece un milagro que los autónomos sigan adelante en este país, y más en el mundo de la cultura. Me parece admirable, por ejemplo, que haya pintoras que consigan sobrevivir a base de ir vendiendo cuadros.
Las cuotas que se pagan actualmente de autónomos me parecen algo abusivo, fuera de la realidad cotidiana. En algunos sectores como la cultura, no se pueden asumir sin un sacrificio tremendo. Ahora mismo estoy aprovechando los dos años de tarifa plana, por haberme dado de alta recientemente, cuando se acabe no sé qué va a pasar. La actividad tiene que continuar, y pagando doscientos y pico euros al mes ¿Cuánto tienes que ganar para tener un sueldo digno? En España estas cuotas me parece que son exageradas. Tengo entendido que en otros países son bastante más bajas
Luego hay un tema estructural. El desarrollo de la industria del comic en España está un poquito flojo. Aunque cada vez se leen más comics, las estadísticas dicen que el comic y la poesía siguen siendo géneros minoritarios Te puedo buscar los datos, pero creo que no llegan ni al 2%. Ante esta situación, pienso que haría falta más desarrollo. Un empuje a nivel de difusión y de promoción de los comics, para que la gente estuviera más familiarizada y hubiera una mayor masa lectora.
En la música me voy encontrando desigualdades. Ayer, precisamente, una amiga me pasó un vídeo de una cantante. “Mira qué chula esta canción” – me dijo. La chica tenía una voz estupenda, cantaba divinamente, y estaba en la calle cantando. Entonces se ve un contraste muy grande entre cómo una minoría de artistas llegan a ganar grandes fortunas, mientras otros subsisten como pueden.
Si te buscas la vida, puedes ganar dinero con la música, tampoco nos vamos a engañar. Está el tema de bodas y ciertos géneros musicales que si tú te estás moviendo, consigues ingresos, pero tampoco está, en muchas ocasiones, todo lo bien pagado que debería estar.
Y luego está el tema literario. Que tú como escritor te lleves un 10 o un 15% de las ventas de la obra que has escrito, es lamentable. Por eso, los escritores estamos explorando cada vez más la auto-publicación.
Es cierto que los poderes públicos van poniendo en marcha ayudas puntuales, pero haría falta una política integral en el sector de la cultura que se centrara en mejorar las condiciones de los artistas.

Finalmente, háblanos de tus libros.
Puedo destacar mi poemario “Ida y Vuelta” que se puede conseguir contactando conmigo en mi web Comunicar con Alma. A ver si consigo subirlo a Amazon. Todo lleva tiempo.
El poemario está estructurado en tres partes. Es un poemario intimista, de verso blanco, no rima. Una exploración del lenguaje. Lo tengo escrito desde hace mucho tiempo. Pero esto es reescribir, reescribir y reescribir. Como decía Borges, uno publica para dejar de corregir
Tengo también publicado el cómic “La oscuridad tras el faro”, con los dibujos de Jeanette Fernández. Es un cómic pequeñito que va ya por la segunda edición. Tengo preparada una continuación, pero tengo que moverlo. Este año estoy elaborando proyectos literarios y consolidando proyectos musicales. Un continuo consolidar.
Además dirigí el comic “Mujeres extremeñas ilustradas”. Conseguí la financiación y lo coordiné. El cómic cuenta la historia de nueve mujeres extremeñas. Todo dibujado y guionizado por artistas de Extremadura. Salió a la luz en 2021 y está disponible de forma gratuita, en digital.
Tengo en marcha ya la segunda parte de Mujeres extremeñas. Pero bueno, no sé si decirlo ya. Estamos ahí las distintas autoras… Esta vez lo he hecho solo con mujeres. No es porque haya trabajado mal con los hombres, sino porque pretendía darle otro enfoque y he querido probar así.
Tengo por ahí otros proyectos de cómics, pero bueno, llevan tiempo y vamos a ver como los vamos sacando a la luz
bitsstarz
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